Año 1919
Oleo sobre lienzo, 111 x 200 cm Nueva York, The Museum of Modern Art.

Claude Monet - Estanque con nenúfares

Desde finales de la década de 1890 hasta 1926, año de su muerte, Monet pinta sin interrupción los nenúfares del estanque que se había hecho construir en su residencia de Giverny. Realiza más de doscientas pinturas que tienen como tema los Nenúfares. En los lienzos más tardíos, el asunto ocupa toda la superficie del lienzo. No hay línea del horizonte, no hay profundidad y el cielo sólo está presente en los reflejos visibles en el agua del estanque.

El pintor elige entonaciones precisas para cada cuadro: unas son clarísimas, basadas en rosas o azules diáfanos, otra son oscuras e intensas, pintadas en azules profundos y verdes; hay también versiones pálidas de nenúfares modulados en amarillos y verdes tenues. Marcel Proust se sintió fascinado al contemplar el lírico espectáculo de los Nenúfares: "flores de tierra y también flores de agua, estos tiernos nenúfares que el Maestro ha pintado en lienzos sublimes [...] son como un primer y delicioso esbozo de vida".