Año 1903
Oleo sobre tabla,
121 x 92 cm
Chicago, The Art Institute

Pablo Picasso - Viejo guitarrista

Un viejo mendigo ciego de ropa desgarrada sostiene una guitarra que apenas consigue hacer sonar en una acera de Barcelona. La monocromía azul invade totalmente la composición con excepción de la guitarra, a la cual está reservada una coloración amarronada. Tanto física como simbólicamente, el instrumento llena el espacio que el delgado cuerpo deja vacío.

La guitarra es, probablemente, el único medio que el pobre ciego mendigo tiene para sobrevivir al hambre. Al igual que en "Viejo ciego con niño", conservado en el Museo Pushkin, aquí al pobrecillo no se le deja en completa soledad y sin ninguna esperanza.

Si en el lienzo del Pushkin hay un muchacho que ayuda al viejo hebreo a procurarse el sustento, en Viejo guitarrista ciego es el instrumento musical el que ejerce esta función de ayuda y consuelo. Se subraya además el papel fundamental que los instrumentos musicales desempeñarán en la iconografía personal de Picasso. Si aquí la forma redonda y panzuda de la guitarra contrasta con el cuerpo, seco y anguloso, del mendigo, en el futuro los instrumentos de cuerda simbolizarán las formas redondeadas y mórbidas de la mujer.

Se ha aplicado al hombre la deformación manierista del alargamiento desproporcionado de los cuerpos; aunque aún guarda relación con la pintura de El Greco, anuncia las operaciones del denominado periodo protocubista.