Año Hacia 1633, modificado en 1642
Óleo sobre tabla, 99,5 x 78,8 cm Kassel, Staatliche Museen Kassel, Gamáldegalerie Alte Meister

Rembrandt - Retrato de Saskia con sombrero

La historia y el significado de este retrato de Saskia no están del todo claros.

De los análisis radiográficos parece poder deducirse que, después de una primera versión, fue modificado por la mano del propio Rembrandt.

La hipótesis más convincente es que la obra naciera alrededor de 1633, año en que el pintor hizo diversos retratos informales de su joven prometida: la fecha se deduce de la comparación con el Retrato de Amalia van Solms de 1632 (París, Musée JacquemartAndré), que muestra la misma disposición de la figura de perfil.

Los estudiosos no coinciden en cuanto a si el cuadro está acabado ni a la iconografía elegida: para algunos, la tabla retrataba originariamente a Saskia como Lucrecia clavándose un puñal.

El cuadro permaneció en el estudio de Rembrandt y el pintor le añadió algunas modificaciones, volviendo a intervenir en él tras la muerte de la mujer en 1642.

En esta segunda fase añadió seguramente la pluma de pavo del sombrero y la piel que lleva la mujer sobre el hombro. Según algunas interpretaciones, estos dos elementos aludirían al tema de la vanitas, es decir, de la caducidad de las cosas terrenas.

También el rico traje podría ser interpretado en esta clave: un vestido análogo aparece en una estampa de un alumno de Rembrandt, titulado El momento de la muerte.

Existe también la hipótesis de que, para el traje, Rembrandt se inspirara en antiguos modelos renacentistas, proponiéndose con ello celebrar la nobleza de la mujer; a este origen aristocrático aludiría también la colocación de perfil, notablemente insólita en la retratística de Rembrandt. Alrededor de 1652, Rembrandt cedió el Retrato de Saskia con sombrero a Jan Six; en 1734, cuando los herederos lo vendieron a un coleccionista de Delft, el cuadro llevaba inscrita la fecha 1642, que confirmaría la hipótesis de que hubiera vuelto sobre él con ocasión de la muerte de su esposa. Posteriores daños comportaron la pérdida de la inscripción y el repinte del fondo.