Año Hacia 1876
Ólso sobre lienzo, 61 x 51 cm París, Musée d'Orsay

Pierre-Auguste Renoir - Mujer joven con mantilla

El cuadro, al que se han asignado diversas fechas (entre 1875 y 1877), contiene una figura femenina de perfil que dirige tímidamente la mirada hacia un punto desconocido para nosotros, en el fondo oscuro de la obra. El velo, que envuelve delicadamente el rostro de la mujer espléndido trozo de pintura ilusionista casi parece simbolizar la intimidad de la escena. Las líneas compositivas del cuadro corresponden a un esquema geométrico fácilmente intuible: un corte vertical separa el fondo en dos zonas cromáticamente distintas, mientras en primer plano el chal de la mujer forma un triángulo a cuadros blancos y negros. El negro predomina con notable peso en el cuadro, siguiendo el ejemplo de Manet, que sabrá rendir homenaje a ese color en obras famosísimas.

La obra carece de profundidad espacial: con excepción de las manos, la figura femenina semeja una superfice plana y entre los pequeños toques con los que Renoir aligera el fondo del cuadro se trasluce a menudo la superfice basta del lienzo. Es evidente que el pintor y en esto consiste la novedad de su arte no busca en modo alguno crear una ilusión óptica: el lienzo es tratado como una superficie plana sobre la que extiende sus colores con arreglo a equilibrios y contrastes internos al cuadro.

El pintor impresionista, en realidad, no está tan interesado en la reproducción realista del tema como en el estudio de la luz y los colores en sus contrastes y armonías, en sus cambiantes reflejos sobre las figuras humanas, las telas y las vestimentas de los personajes. En esta pintura en particular, la fuente inspiradora de Renoir es de nuevo una mujer, captada aquí con un encuadre que acentúa la gracia de su pose, el perfil difuminado de un personaje que parece misterioso.